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Experto de la OMS: el estudio del virus tendrá unanimidad a pesar de la presión
El jefe del equipo de la OMS que visitó China en enero y febrero, reconoció que las presiones políticas se ciernen sobre el virus, pero garantizó que su informe basado en determinar el origen del virus será “unánime”.
El jefe del equipo de la Organización Mundial de la Salud destinado a determinar los orígenes del coronavirus en Wuhan, Peter Ben Embarek, reconoció que la misión podría enfrentar «presiones», pero insistió en que el producto final tendrá luz verde unánime de todos los miembros científicos.
Ben Embarek, experto en seguridad alimentaria y enfermedades que mutan de animales a humanos, dijo en entrevistas el miércoles y jueves que el equipo espera que el informe, que ahora totaliza unas 280 páginas y se completa con gráficos, fechas y anexos, esté listo para su lanzamiento la próxima semana.
El informe es un estudio de primera fase como parte de las pautas establecidas por los funcionarios chinos y el equipo de la OMS.
El experto de la agencia de la ONU, que dirigió un equipo internacional que visitó China en enero y febrero, reconoció que las presiones políticas se ciernen sobre el virus.
“Estamos en el mundo en el que vivimos”, dijo. «Es posible que haya presiones de derecha a izquierda».
“Lo que podemos garantizar es que todos estarán a bordo” y serán “unánimes” una vez que se complete el texto, dijo Ben Embarek. El «ajuste fino del informe» se ha centrado en cuestiones científicas, mientras que algunas cuestiones de traducción chino-inglés estaban «tomando mucho tiempo», agregó.
Dijo que el documento está siendo redactado por todos los expertos y es parte de un proceso «largo y complejo».
China denuncia presuntas «presiones políticas»
El periódico chino Global Times publicó el miércoles una entrevista con Liang Wannian, el jefe de la parte china del equipo, quien habló de presuntas presiones políticas que equivalían a una «enorme falta de respeto al trabajo de nuestros científicos».
Liang fue citado diciendo que algunos políticos y medios internacionales habían “insistido en politizar la cuestión científica de rastrear la fuente de covid-19, independientemente de los hechos científicos, para su propio beneficio personal, malinterpretando arbitrariamente los hallazgos científicos y «los informes de nuestro equipo conjunto».
Se esforzó por enfatizar el espíritu de cooperación entre los científicos y dijo que ambas partes habían cooperado abierta y completamente durante la investigación de un mes, y que «los resultados de este estudio conjunto en China son el consenso de expertos chinos y extranjeros».
Liang se hizo eco de los comentarios de Ben Embarek sobre el tiempo extendido para publicar el informe y explicó que el proceso requerido para presentar un informe completo y científicamente riguroso «lleva algo de tiempo».
El equipo no encontró casos de covid-19 antes del 8 de diciembre de 2019, dijo.
Ben Embarek citó la necesidad de investigar el posible papel en la pandemia del comercio local de productos de animales salvajes congelados de granjas en el sur de China y sus alrededores en 2019 y más allá en un mercado en la ciudad de Wuhan.
«Aún no conocemos los orígenes de la pandemia», dijo, y agregó que la transmisión de la cadena de frío, incluso a través del envasado de alimentos congelados, era una «posible ruta» de propagación, pero que el problema requiere una mayor exploración.
Pero Liang promovió las afirmaciones del gobierno chino de otras fuentes de la pandemia diciendo que la transmisión de la cadena de frío «juega un papel importante en el origen y transmisión de la epidemia». El equipo internacional dejó abierta la posibilidad de que la cadena de frío intervenga en la transmisión.
El equipo de la ONU tardó muchos meses en organizar una visita a China con las autoridades del gobierno comunista. Los críticos dicen que la demora costó un tiempo valioso en los esfuerzos por descubrir los orígenes de la pandemia, que ha provocado más de 2.6 millones de muertes.
China, con las manos «fuera» de la investigación
Este viernes, Chen Xu, embajador chino ante las organizaciones de la ONU en Ginebra, dijo que la OMS había seleccionado a los miembros del equipo que hicieron el trabajo con sus homólogos chinos, lo que parece sugerir que China no ejerció influencia política.
«Tenemos nuestras manos fuera, como los funcionarios de la OMS también», dijo Chen, aludiendo a la secretaría de la agencia de la ONU. «Dejemos que los científicos (hagan) su trabajo».
La visita del equipo fue políticamente delicada para China, a la que le preocupan las acusaciones de que no manejó adecuadamente el brote inicial. Poco después del brote, el gobierno chino detuvo a algunos médicos chinos que buscaban dar la alarma sobre el brote, que se cree que se originó en Wuhan a fines de 2019.
El equipo de la ONU se vio acosado por preguntas sobre cuánta libertad le daría China para visitar sitios y hablar con las personas que quisieran. Al final, el equipo pareció satisfecho con los arreglos, al menos en sus comentarios públicos.
Los líderes de la OMS, incluido el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus, elogiaron repetidamente la respuesta temprana del gobierno chino, a pesar de que las grabaciones de reuniones privadas obtenidas por la agencia Associated Press que expusieron cómo los altos funcionarios de la OMS estaban frustrados por la falta de cooperación de China.